Es nieve. Simples, pero perfectos copos de nieve que al lente adecuado muestran toda su belleza y complejidad.
Quién logró estas magníficas tomas es un fotógrafo ruso, Alexey Kljatov, y lo hizo desde el balcón de su casa con una cámara Canon A650, modificada artesanalmente por él mismo. Dice que solo con algo de tela adhesiva, madera y tornillos (y lo muestra en su sitio web por si alguien se atreve a imitarlo).
Las fotografías las realizó, según explica, el invierno pasado en la terraza abierta que tiene donde vive. Utiliza una superficie de cristal, una linterna LED, telas naturales y de color oscuro de fondo. El resultado son estos preciosos fractales que solo nos recuerdan que hay mucho más en la naturaleza de lo que nuestros limitados ojos y sentidos nos dejan ver. Y ante ella, no queda más que profesar un profundo respeto.
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