Decidió estudiar el cerebro humano porque su hermano sufría de esquizofrenia. Más tarde, siendo parte del Departamento de Psiquiatría de la Universidad de Harvard, en Boston, repentinamente el 10 de Diciembre de 1996 sufrió un derrame cerebral, a los 37 años de edad, del cual le costó 8 años recuperarse.
Pero la experiencia que la neuroanatomista Jill Bolte Taylor cuenta en 20 minutos en las Charlas TED no es el relato frío y académico que podría esperarse de un científico. No. Se asiste a una experiencia plena de información valiosa, pero sobretodo de emocionantes posibilidades para nuestras vidas particulares.
Allí cuenta paso a paso lo que ocurrió esa mañana y cómo, alternadamente, funcionó con su Hemisferio Derecho e Izquierdo desconectados entre sí. Entonces, explica que el primero procesa información en paralelo y el segundo en serie. Esto quiere decir que a cada uno le interesan cosas muy distintas.
Mientras experimentaba el derrame y sólo estaba operativo su HD (que se ocupa del aquí y ahora, movimiento del cuerpo, sistemas sensoriales) se sentía un enorme ser energético que no lograba distinguir sus límites y estaba conectada con todo lo que la rodeaba: “Era parte de una sola familia humana, perfecta, completa, hermosa”.
A ratos, su HI (el que piensa lineal y metódicamente, escoge detalles del presente y los conecta con el pasado y futuro, además de utilizar el lenguaje) volvía a conectarse para alertarla respecto a pedir ayuda, fue cuando entendió lo que ocurría: estaba sufriendo un derrame, un vaso sanguíneo había explotado en su cabeza.
Pero este HI volvía a desconectarse y quedaba al mando solo el HD, la conciencia del todo, espacio pleno de paz al que ella llama cariñosamente “La La Land” y del que no quería irse, cuando el HI volvía…
Su relato es impactante y quizás haya que verlo un par de veces para lograr entender del todo sus alcances.
Para ella lo vivido fue un enorme regalo. En un momento sintió que estaba viviendo su proceso de transición hacia otra dimensión, que era imposible que ese enorme ser en expansión que se iba volviera a meterse en ese pequeño cuerpo. Pero pudo hacerlo y hoy afirma que “podemos elegir quienes queremos ser en cada momento, pues tenemos dos mentes cognitivas. Mientras más tiempo pasemos eligiendo nuestro Hemisferio Derecho, más paz proyectaremos en el mundo y más pacífico será nuestro planeta y pensé que era una idea que valía la pena difundir”.
Su experiencia también fue plasmada en el libro “My Stroke of Insight”, lanzado en 2008, premiado en Nueva York por su aporte para una vida mejor, que inspiró un ballet y que también se quiso llevar al cine.
La Dra. Jill Bolte Taylor fue elegida ese mismo año en la lista de las 100 personas más influyentes del mundo por la Revista Time.
Duración: 20.11 Minutos. Subtitulado.