Costa Rica se moviliza por una ley contra maltrato animal

Ayer realizaron su sexta marcha consecutiva desde 2009 para exigir una ley que sancione con cárcel y multas severas a los maltratadores. Al menos, las peleas de perros quedaron prohibidas en abril tras aprobarse otra normativa. Señalan que el maltrato animal es el primer signo de violencia en la sociedad.

Se calcula en 18 mil personas las que ayer marcharon, junto a sus mascotas, por las principales calles de la capital de Costa Rica, San José, para volver a exigir una ley que castigue con penas de cárcel y multas a los maltratadores de animales. Y es que no se trata de la primera, sino de la sexta marcha que se hace cada año, desde 2009. A la primera, asistieron no más de 700 personas.

Los convocantes, un puñado de ONG como la Asociación para el Bienestar y Amparo de los Animales, ABAA, Asociación Nacional Protectora de Animales y Fundación Tierra de Animales, con mucha presencia virtual, señalan que la ley urge, además, para  “hacer conciencia porque el maltrato animal es el primer signo de violencia en la sociedad”. Calculan que en Costa Rica la población canina, con o sin dueño, llega al millón y medio, pero no hay datos precisos de la felina.

En el país centroamericano, las organizaciones animalistas dicen que cada día llegan del orden de 20 animales reportados con maltrato y signos de crueldad e incluso violaciones; ataques con machetes, disparos, mutilaciones, quemaduras con ácido, además de casos de abandono y negligencia, son habituales para ellos y la legislación no los tipifica como delitos, por lo que hay total impunidad.

La masiva marcha de ayer.

La masiva marcha de ayer.

LARGO RECORRIDO

Los activistas intentan sacar adelante el proyecto de Ley, el 18.298, presentado por la sociedad civil y que pasó a la Comisión de Ambiente en el pasado periodo y no ha logrado ser votado en la Asamblea Legislativa, donde ya cuenta con respaldo de 39 diputados, de diferentes partidos.

El proyecto incluye modificaciones a la Ley de Bienestar Animal, que regula la tenencia de mascotas, y reformas al Código Penal que considera penas de cárcel a quienes agreden a los animales. En la memoria de sus promotores hay casos de extrema violencia (una petición en línea que lleva 40 mil firmas muestra una foto de un animalito quemado con ácido). Pero ha encontrado la resistencia de sectores como el ganadero que considera poco claros algunos conceptos del proyecto y que consideran podría perjudicarlos.

A comienzos de abril, al menos, se avanzó con la aprobación de una ley que prohíbe las peleas de perros, considerada una práctica que inflige deliberadamente sufrimiento a los canes, donde sufren lesiones que amenazan sus vidas y por la naturaleza de la práctica no reciben atenciones médicas. La nueva disposición impone sanciones económicas y cárcel para los infractores, además de una eventual lista de éstos.

AL NUEVO PRESIDENTE

Por esos mismos días un numeroso contingente de manifestantes llegó hasta la casa presidencial, con 180 mil firmas de respaldo, para pedir a la que ahora es ex presidenta Laura Chinchilla que no retirara el proyecto en tabla en la Asamblea, con el objetivo que fuera aprobado antes de terminar su administración.

Tras la marcha de la jornada previa, hoy las organizaciones pro derechos de los animales apelan al nuevo presidente Luis Guillermo Solís, recién asumido el 8 de mayo y del hasta entonces opositor Partido Acción Ciudadana, que en campaña comprometió defender a “nuestros hermanos menores”. Incluso señalan que fue el voto “animalista” el que  lo llevó al sillón presidencial y lo emplazan a aprobar de una buena vez la ley.