El proyecto de Repsol para extraer crudo de Lanzarote y Fuenteventura y que mantiene en pie de guerra a sus habitantes, fue detenido temporalmente por la justicia en espera de mayor información sobre el impacto ambiental. Las dos islas tienen pendiente pasar a zona protegido como ‘Lugar de Interés Comunitario’… casualmente es la zona que se quiere perforar.
La amenaza petrolera está en tantos lugares que a veces las pequeñas victorias contra los gigantes, dejan de ser noticia. El viernes pasado el Fondo Mundial para la Naturaleza, WWF, envió email a todos quienes firmaron la petición para detener los planes de prospección petrolera en las Islas Canarias, en campaña desde que el gobierno central diera luz verde al proyecto de la española Repsol.
Más de 100 mil personas firmaron y en respuesta a los recursos judiciales contra los sondeos, el Tribunal Supremo respondió paralizando temporalmente las labores por falta información ambiental. El Ministro de Industria español -gran promotor de la iniciativa por considerar que dará al archipiélago impulso económico, cuyo desempleo alcanza el 33%-, señaló que la información se entregará en dos o tres semanas y todo seguirá según lo previsto.
SOSPECHOSO RETRASO
Pareciera que todo está en orden. Pero los canarios se oponen tenazmente a que se busque petróleo en sus aguas marinas y, en este retraso, algunos ven la mano del gobierno que sabe que los sondeos afectarán áreas que están propuestas como ‘Lugar de Interés Comunitario, LIC’, al este de Fuenteventura y Lanzarote.
Allí es donde están proyectadas las prospecciones, a una profundidad de 3.500 metros. Hasta el Comisario de Medio Ambiente de la Unión Europea ha expresado sus reparos al proyecto, pues afectaría la Red Natura 2000, de Zonas Especiales de Conservación (ZEC) para proteger hábitat y especies (que incluyen las Reservas de la Biosfera) y que Life+Indemares (que va por la defensa de los mares españoles) ha develado como de sobresalientes valores.
La declaración de LIC de las áreas marinas de Lanzarote y Fuenteventura será, entonces, determinante y depende del Ministerio de Medio Ambiente español. Casualmente, de entre las 10 zonas propuestas por éste a la Comisión Europea –que financia un 50% de su protección- sólo tiene pendientes las mencionadas, que coinciden con la zona en que Repsol quiere perforar…
Tras casi una década de tramitaciones, en 2012 el gobierno central autorizó los planes de Repsol en Canarias, que estiman podría cubrir el 10% de la demanda de hidrocarburos, con una extracción diaria de 100 mil barriles.
¿QUÉ HAY EN LANZAROTE Y FUENTEVENTURA?
Se dice que las Canarias, archipiélago de ocho islas en el Océano Atlántico, situado frente al norte de África y una de las comunidades autónomas de España, eran llamadas las Islas de los Afortunados. Algo así como el paraíso de los bienaventurados. Y aunque vive esencialmente del turismo –y los males que éste puede conllevar- mantiene sus condiciones naturales: tiene una enorme biodiversidad en sus tierras emergidas y de origen volcánico, clima subtropical, gran riqueza paisajística y geológica, tres de ellas son Reservas de la Biósfera, cuentan con cuatro parques nacionales y varios zonas que son Patrimonio de la Humanidad.
Sus aguas marinas tienen enorme importancia, por ser hábitat de gran cantidad de cetáceos de hábitos profundos, además de de delfines mulares, listados y moteados del Atlántico.
UNESCO señalaba, cuando se incorporaron como Reservas, que “esta islas se han convertido en referentes de prácticas de sostenibilidad a nivel mundial”. De hecho, la más pequeña de ellas, El Hierro, está inaugurando en semanas un sistema único en el mundo que incorpora energía solar y eólica y la transformará en la primera isla 100% renovable.
Una marea negra en los mares sería no solo un desastre para la vida marina, el turismo (sus 2 millones de habitantes, reciben cada año casi 12 millones de visitantes) y la pesca; también corre riesgo el abastecimiento de agua potable, ya que el 100% de ella se extrae del mar. Eso, sin contar la actividad sísmica del fondo marino, que aumenta los peligros.
Las perforaciones se harían a 10 kilómetros de las playas de Fuenteventura y a 18 de Lanzarote. Y ya se ha difundido que Repsol no considera en su estudio de impacto ambiental las últimas normas de seguridad exigidas tras el accidente en el Golfo de México en 2010.
No sólo entidades ambientalistas como Océana, Greenpeace, WWF, Friends of Earth, Ecologistas en Acción o la UICN, respaldan la campaña –cuya petición aún puedes firmar- y que fue enviada a los presidentes del parlamento y comisión europea, del gobierno español y a quien dirige Repsol.
Se aboga allí por impulsar energías renovables que mitiguen el impacto del cambio climático. Del otro lado, ciudadanos afectados, quizás, por la cesantía también han levantado una plataforma; y esperan que el petróleo cree 56 mil puestos de trabajo y una inversión prometida de unos 10 mil millones de euros.
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