Triunfo de comunidad de Caimanes contra minera Los Pelambres

La Corte Suprema acogió un recurso contra minera del grupo Luksic por disminuir y contaminar aguas del estero que abastece del vital elemento. El fallo alude al deber del Estado de garantizar un medio ambiente sano. Los vecinos viven 12 kms. abajo de uno de los mayores relaves de tóxicos del mundo, contenidos por una muralla de 240 metros de altura.

En agosto de 2013 la Corte de Apelaciones de La Serena falló a favor de la minera Los Pelambres, argumentando que la demanda para que su tranque de relaves ‘El Mauro’ fuera demolido, fue presentada fuera de plazo. Esta semana la Corte Suprema acogió el recurso y restableció la cordura a una causa que los vecinos vienen peleando hace años: ni más ni menos que la contaminación del agua potable rural que los abastece.

El fallo señala que las obras de la minera alteran y obstruyen el libre curso de las aguas y el flujo o cauce de las mismas. Con la construcción día a día de un nuevo muro de contención del tranque de relaves “El Mauro” y con el vertimiento de desechos en el citado depósito se contaminan las aguas, todo lo cual impide a los actores y a todo el pueblo de Caimanes captar desde el pozo de agua potable rural las aguas que llegan de su descenso natural, y produce contaminación del recurso hídrico y deterioro del medio ambiente con el consiguiente perjuicio para la comunidad local».

Echando por tierra argumentos esgrimidos en anteriores procesos, señala que por tener consecuencias medioambientales, la demanda de los vecinos alude a derechos constitucionales. Afirma que es deber del Estado garantizar el derecho de las personas a vivir en un medioambiente libre de contaminación, lo que no está ocurriendo con la comunidad de Caimanes.

La corte ordena a la minera “permitir el escurrimiento natural de las aguas del estero Pupío a la comunidad de Caimanes, libre de contaminación de desechos provenientes del tranque”. Para ello debe proponer al tribunal en el plazo máximo de un mes un plan de obras “que podrán ejecutarse por medio de la demolición o remoción, total o parcial (de) el muro de contención del referido tranque… o bien, a través de otras obras principales o complementarias de las indicadas”.

Ayer la comunidad exigió el cierre del tranque. “La Corte Suprema nos ha dado la razón, por segunda vez, y ha quedado claro que la contaminación de las aguas existe y las reclamaciones de la gente siempre han sido verdad. Hace seis años que esperábamos esta resolución”, señaló su vocero y representante, Cristián Flores, aludiendo también a una anterior fallo referido a los peligros de la obra antes sismos, un murallón de 240 metros de alto que retiene los desechos tóxicos del mayor relave de América Latina y tercero más grande del mundo, con capacidad para 1.700 millones de toneladas.

Es el mismo proyecto minero que podría dejar sin agua a la Región Metropolitana si se construye la central Alto Maipo, que intervendrá la cuenca de este río y que mantiene en pie de guerra a los habitantes del Cajón del Maipo y a buen número de santiaguinos; que este sábado 25 de octubre vuelven a protestar. El proyecto pretende abastecer con el 100% de la energía allí producida a Los Pelambres.

El dirigente insiste en que debieran paralizarse las obras, pero estima casi imposible que puedan cumplir con el fallo de la Suprema: “dado que el tranque fue emplazado sobre el cauce natural del estero Pupío, no veo por donde podrían liberar las aguas y al mismo tiempo la contaminación que ya existe…”.

IGNORADOS

La historia es larga. Y los problemas de la pequeña comunidad de Caimanes que apenas supera los 1000 habitantes, ubicada en la comuna de Los Vilos, Provincia de Choapas, ha pasado casi inadvertida para la mayoría del país. Hasta una huelga de hambre de 81 días hubo para llamar la atención sobre su drama, sin repercusión alguna. Y, por cierto, no son pocas los relatos de cómo el dinero de la minera ha divido a sus habitantes

Los Pelambres se instaló en la zona a principios del 2000. Es una de las cinco minas más ricas de cobre a nivel mundial y sus reservas se estiman en más de 2.100 millones de toneladas. El 60% de su propiedad es de Antofagasta Minerals de la familia Luksic y el restante 40% esta en manos japonesas.

Los vecinos de Caimanes viven 12 kms. abajo de «El Mauro». Y si al comienzo era el miedo a que el murallón se les desplomara encima, pronto vieron otras consecuencias: la contaminación y la disminución de las aguas que les permite la subsistencia. Hoy aplauden la resolución del tribunal, pues al menos hay un reconocimiento de los hechos que hasta ahora la autoridad negaba:

“Aquí los únicos que han dicho que las aguas no estaban contaminadas son los organismos del Estado, los mismos que autorizaron el tranque… Esto pasa en muchas comunidades en que los gobiernos por no pisarse la cola y asumir sus errores simplemente sacrifican a las comunidades”, acusa Flores y otra vez se refiere a la gran cantidad de irregularidades que cruza de la historia de Pelambres en la zona.

El documentalLos sin agua” relata en parte esta travesía.
Duración: 8.39 Minutos.